El diseño del restaurante se basó en crear un espacio que fuera cálido, sofisticado, intrigante y acogedor. Se estudiaron referentes de bares clásicos americanos para entender qué elementos contribuyen a la generación de la atmósfera deseada. Con esa concepción inicial, materiales nobles y naturales como la madera en distintos tipos de formatos, tonos y texturas fueron los elementos protagónicos.